A la hora de la verdad no es nada fácil.

Se suele empezar con ganas, mucho ímpetu y tal pero por diversos motivos nos vamos desinflando por el camino.

Ser emprendedora y mostrarnos online no es tan sencillo como nos cuentan.

Y creo que uno de los motivos principales tiene que ver con cómo nos percibimos a nosotras mismas.

Seguramente has oído hablar del síndrome de la impostora, de ansiedad, de falta de autoestima, de autopercepción.

Efectivamente todo eso aparece por muchísimos motivos: sociales, culturales, familiares, pero hay uno que para mí es esencial y tiene que ver con el ejercicio de una misma.

No sabemos bien ni quiénes somos, ni a qué nos queremos dedicar, ni cómo podemos ayudar antes de sentarnos frente a una pantalla y empezar nuestro negocio.

Para mí no es que sea malo esto, cuántas emprendedoras no habré visto que empezaron contando una cosa y ahora son exitosas hablando de otras. 

Todas, absolutamente todas, necesitamos trazar nuestro propio camino.

Pero nos encandila lo que YA consiguieron OTRAS. (hay algunas redes que además son especialistas en encandilar)

Sus supuestos métodos.

Muchas vendemos nuestro supuesto método de éxito para llegar hasta aquí.

Y si digo “supuesto» es porque muchas veces no es exitoso, ni siquiera es propio, pero está muy bien contado.

Y como nosotras estamos comenzando, o llevamos tiempo, pero no tenemos los resultados que queremos, nos dejamos seducir por ese mensaje y lo hacemos nuestro.

Ese mensaje, que en definitiva no nos pertenece, porque NO es nuestro  y  nada tiene que ver con nuestro anhelo real.

No es sencillo, para qué negarlo, incluso puede que no tengamos que inventar nada, pero para poder destacar necesita de NUESTRA VOZ.

En el fondo todas querríamos monetizar cuanto antes, que las cosas nos fueran bien desde el principio y que en el menor tiempo posible viéramos resultados.

Sobre todo por el tiempo que le dedicamos a las redes sociales.

Y Ahí hay un gran tema, quizá el tiempo que le dedicamos a las redes, no es el tiempo que necesita nuestro negocio para salir adelante.

Pero yo no te voy a hablar de productividad, o sí, quizá en algún momento lo pueda hacer pero no es mi tema estrella.

Lo que quiero transmitirte es que para ser visibles en redes sociales, sí necesitas tiempo para invertir, también necesitas dinero (al menos para aprender lo que funciona y no estés dando tumbos) y hay algo primordial y creo que no se habla lo suficiente, necesitas conocerte a ti misma.

Puede que seas una persona que ya invierte en su autoconocimiento, y conozcas tus ritmos, tus puntos fuertes y débiles, no sientas miedo de exponerte, hables tranquilamente sobre lo que te hace vulnerable, empatices fácilmente con los demás, sepas cómo relacionarte asertiva, afectiva y estratégicamente y entonces todo esto que te digo no te sirva de nada.

Pero si estás en otro momento puede que Sentido y Visibilidad sea el Programa que estás deseando transitar.